La Navidad
El período de Navidad es muy esperado por todos mas sobre todo por los niños a quienes les toca recir sus regalos navideños el día de reyes. La magia de las fiestas navideñas se debe a grandes rasgos a la decoración navideña y el espíritu consumista que domina los días fríos de diciembre. Cenas de empresa, eventos culturales, intercambio de regalos son algunos de los puntos interesantes de esta festividad. La Navidad en España se vive intensamente mucho antes del 25 de diciembre. Prueba de esto son los preparativos de ayuntamientos a decorar calles y plazas de pueblos y ciudades. A su vez, el mercado vive momentos de gloria si pensamos en las compras que se realizan en alimentos, bebidas y regalos, elementos indispensables para que todo se haga según la tradición. El elemento principal para este período es, sin duda alguna, el árbol de navidad.
Árbol navideño
La elección de árbol es una cuestión fundamental siendo el elemento decorativo más importante dentro del hogar durante el período navideño. El cambio climático y todas las consecuencias que ha supuesto, ha hecho que durante el último tiempo muchos grupos de personas - consumidores - sean más escépticos con los temas ambientales y sean más conscientes a la hora de hacer sus compras. Esta es una de las dudas que se plantea en torno al árbol navideño, ¿es el abeto artificial la opción más ecológica? Parece ser que no.
Cuando entran en juego los argumentos a favor y en contra del uso de un abeto artificial, uno empieza a reconsiderar su comportamiento de compra. Hemos hecho una investigación acerca del tema y en esta publicación aprovechamos para reflexionar sobre las ventajas y desventajas de los abetos artificiales versus los árboles naturales. Veremos que una de las concluciones a la que llegamos es que, ecológicamente hablando, lo ideal sería celebrar una navidad sin árbol. Lo que uno puede hacer es improvisar con algo que ya hay en casa, o bien un objeto, o bien con una planta ya existente con la que se puede crear el resultado deseado.
El árbol artificial

✔️ El árbol artificial es con diferencia el artículo más vendido en los grandes supermercados e hipermercados, tiendas con artículos de casa o muebles, etc. Hay de diferentes especies como pino, abeto, picea, etc. La ventaja fundamental es su bajo coste y fácil transportabilidad. No hay duda de que comprar un árbol en una caja que se puede montar y desmontar fácilmente y además a un precio bajo, son dos motivos atractivos para optar por él. Asimismo, es una inversión de medio plazo, si solo tenemos en cuenta que el mismo producto se puede reutilizar al menos durante 5 años. Su composición le permite ser más resistente y ligero y, al ser fabricado de plástico, no precisa más cuidado. Presentan una gran diversidad de estilos ya que existen árboles de todos los colores con o sin adornos y luces integrados, hecho que los convierte en la opción más competitiva hasta para personas que no desean invertir mucho dinero para adornos extraordinarios. En definitiva, se adapta a todos los gustos personales y son más rentables desde el punto económico.
✖️ ¿Y si estos bonitos árboles que adornan nuestro rincón del salón contienen sustancias nocivas? Esta es la otra cara que la mayoría de la gente desconoce. Los abetos artificiales se fabrican con resinas plásticas del petróleo que contaminan el ambiente, además de no ser reciclable. A diferencia con los árboles naturales, los abetos artificiales no tienen impacto positivo al medio ambiente ya que no eliminan el dióxido de carbono. Es más, no son nada sostenibles y difícilmente se reciclan, no son biodegradables. Un árbol artificial puede ser bello y parecer natural pero no desprende el aroma que tiene un verdadero pino.
Árbol natural

✔️ Ahora bien, los árboles naturales resultan ser la opción más ecológica. Son 100% biodegradables y no hacen daño al medio ambiente, de hecho ayudan a evitar el calentamiento global ya que eliminan el CO2 de la atmósfera. Las personas que optan por un árbol natural normalmente tienen intención de replantarlo una vez pasadas las fiestas ayudando así al medio ambiente incluso después de las fiestas. Al contrario de lo que piensa la mayoría, no se talan los bosques para su producción, existen regiones en varios sitios del mundo que se especializan en producciones y hay que recordar que para cada hueco que hay de un árbol vendido, otro será plantado. Estas granjas son reforestadas con frecuencia y son zonas controladas. Y si no se replanta el árbol porque se ha estropeado, puede servir de compost natural. Desde el punto de vista estético, un pino o abeto real es un ser vivo que ofrece vitalidad y energía con su presencia. Además de ser generador de oxígeno, tiene un aroma fresco dando la sensación de un ambiente navideño verdadero.
✖️ No obstante, hay una serie de puntos en contra que uno podía ser escéptico de cara al dilema entre un árbol natural o artificial. Los árboles naturales son más difíciles de transportar ya que son más frágiles, pesan más y no vienen en cajas. Antes de la compra, hay que asegurarse de que tenga raíces porque si no, no puede durar mucho tiempo. Al ser un ser vivo, se le tiene que dar más cuidado, regarlo a diario, no colocar objetos de calor o luces que podían provocar que se secara o calentara. La temperatura de la casa no debe ser muy elevada y será necesario limpiar con frecuencia alrededor del abeto ya que se le caen algunas ramas pequeñas o se cae la tierra del macetero. A estos, se suma la necesidad de tener que replantarlo tras finalizarse la navidad o usarlo como compost.
Si hacemos el balance de pros y contras, llegamos a la conclusión de que el árbol natural presenta muchas más ventajas medioambientales que un abeto artificial. Desde el momento de su fabricación hasta el día de su retirada los árboles artificiales no favorecen más que las industrias de fábricas de artículos usando resinas plásticas de petróleo.
Promotons es una plataforma que se ha diseñado para ofrecer al usuario folletos y catálogos promocionales porque creemos que así podíamos incluso influenciar las marcas y grandes negocios para que reduzcan el uso de papel que gastan en la impresión de papel. Las opciones están ahí y nosotros, las personas, somos los que toman las decisiones.
💭 ¿Prefieres un folleto digital o un folleto impreso que requiere que se talen árboles para su distribución?
💭 ¿Acaso es mejor comprar un árbol natural en vez de uno artificial e incentivar la plantación de uno nuevo?
💭 ¿Es sostenible preferir los impresos catálogos anuales IKEA que llegan a nuestras casas al principio del año que verlos online?
💭 ¿Es correcto recoger cada semana el folleto de Lidl que hay en la entrada y salida de cada establecimiento si está disponible online?